En lo que va de mi vida he visto muchos proyectos innovadores que los docentes realizaban a favor de los estudiantes o la institución educativa. Proyectos como las aulas colaborativas, que consistía en implementar un aula de clases con tecnología de vanguardia, que a su vez fomentaba la competencia y el trabajo en equipo. Cabinas de Internet, que ofrecían servicios de internet, impresión, locutorio telefónico y más, cuyos ingresos eran para implementar la sala de computo. Certificación de los alumnos y muchos más.
Pero este año me ha tocado trabajar con proyectos productivos y debo decir que realmente he encontrado la esencia del trabajo con proyectos, ya que realmente estos proyectos mueven a toda la comunidad educativa, centrándose en el alumno y dotándole de nuevas habilidades que mañana más tarde podrán ser aprovechadas en el campo laboral.
Un proyecto productivo es un camino o método que ordena ideas, acciones y une esfuerzos para satisfacer necesidades y para aprender a producir produciendo.
Es PRODUCTIVO porque sirve para producir bienes, servicios, saberes y conocimientos necesarios para mejorar la vida.
Es EDUCATIVO porque enseña a vivir en comunidad, en forma organizada, a tomar decisiones propias, a manejar los recursos, a resolver problemas, a ser emprendedores, a ser competentes en un oficio o profesión.
Es PARTICIPATIVO porque el equipo y el coordinador o la coordinadora trabajan equitativamente, desde el inicio hasta el fin del proyecto. Los participantes aprenden a ser competentes cuando participan plenamente.
La maestra o el maestro asumen nuevas funciones, como asesor o asesora, supervisora o supervisor, coordinadora o coordinador del trabajo común. Para realizar ese conjunto de actividades requerimos maestros competentes, con conocimientos técnicos y destrezas técnicas, locales o talleres con sus herramientas, equipos, materiales, insumos básicos, etc.
Mediante un proyecto productivo-educativo-participativo podemos realizar, dentro de los límites de un presupuesto, de recursos materiales y de un tiempo determinado; un conjunto ordenado de actividades orientadas a producir un bien, satisfacer una necesidad, resolver algún problema o a mejorar algo en nuestro entorno social, económico y cultural.
Hoy, muchas veces, dejamos participar a los alumnos y a las alumnas solamente con su cabeza, con el pensar; dejando el corazón, el sentir, el querer y la manualidad. También hay maestros que solamente dan órdenes a los jóvenes permitiéndoles que participen solamente con sus manos, dejando su corazón y cabeza fuera del aprendizaje.
Es nuestro propósito que el maestro y la maestra sean expertos coordinadores del aprendizaje y que orienten a su equipo mediante sus experiencias y la ayuda de esta guía. El futuro del aprendiz está en sus manos. Sus palabras y actuación sobrevivirán en los jóvenes. También por eso es conveniente establecer durante el trabajo un ambiente de apertura, tolerancia, comunidad, igualdad y de una visión común entre la maestra o el maestro y los miembros del equipo laboral; porque solamente mediante este ambiente abierto con objetivos claros y concertados se facilitará el desarrollo de competencias requeridas.
Es increíble lo que podemos lograr en lo educativo, económico, social, emocional, etc.
Para más información visitar:
http://www.ciberdocencia.gob.pe/archivos/elaboremos_proyectos.pdf
